Tres palabras: yo te quiero.
Es un hecho: tú la quieres,
y se ve: ustedes se quieren
lo que implica: no me quieres.
Yo te miro y me derrito,
ella mira seductora;
como antes nos miramos,
no me miras, ya me ignoras.
Y así siempre van los verbos,
duele la conjugación,
pero aún espero algún día
poder pronunciar AMOR.
Gracias por la visita Gaby.
ResponderEliminarQue bueno que te guste. Besos***
Wow!!! increíble, de verdad un poema con toda la emoción que uno puede sentir. Me encanto ese sentimiento profundo que es el amor pero en conjugado de manera diferente escribiendo una historia de amor no correspondido y otra de amor encontrado. Muy bueno te felicito Tania.
ResponderEliminarGracias, Alejandra. Sí, la felicidad de uno es la tristeza de otro.
EliminarBesos***