Te daría mi alma y vida en bandeja,
más tú ni siquiera recibes la ofrenda.
No fue suficiente mi energía y calor,
no derretí el hielo de tu corazón.
Todo en un abrazo te quise brindar,
pero tus defensas no dejan pasar.
Sigues esperando quien te quite el sueño,
Y mi corazón buscará otro dueño.
Fuiste una ilusión que se desvanece,
marchita la flor, nunca más florece.
Te ofrecí alegría, pero no quisiste;
ya no hay vuelta atrás, tú te lo perdiste.
Identificada completamente con este poema, que por cierto te quedo excelente. Te felicito. =)
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